Bienvenido a nuestro sitio dedicado a explorar los diversos versículos y enseñanzas de la Biblia sobre Versículos De La Biblia Sobre Sanaciones Divinas. Este tema es uno de los muchos que desempeñan un papel importante en nuestro camino espiritual y comprensión.
En esta página, encontrarás una selección de versículos y pasajes bíblicos que abordan específicamente Versículos De La Biblia Sobre Sanaciones Divinas. Además, exploramos escrituras relacionadas que ofrecen una comprensión más profunda de los matices y aspectos de este tema.
Esperamos que la información que encuentres aquí sea esclarecedora y edificante. Adentrémonos en los versículos bíblicos para obtener una mayor comprensión de este importante tema.
“¿Está alguno enfermo entre vosotros? llame á los ancianos de la iglesia, oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor”
— Santiago 5:14
“El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos á los pecados, vivamos á la justicia: por la herida del cual habéis sido sanados”
— 1 Pedro 2:24
“Cuanto á Jesús de Nazaret; cómo le ungió Dios de Espíritu Santo de potencia; el cual anduvo haciendo bienes, sanando á todos los oprimidos del diablo; porque Dios era con él”
— Hechos 10:38
“Mas él herido fué por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; por su llaga fuimos nosotros curados”
— Isaías 53:5
“Confesaos vuestras faltas unos á otros, rogad los unos por los otros, para que seáis sanos; la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho”
— Santiago 5:16
“La oración de fe salvará al enfermo, el Señor lo levantará; si estuviere en pecados, le serán perdonados”
— Santiago 5:15
“Mas á Jehová vuestro Dios serviréis, él bendecirá tu pan tus aguas; yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti”
— Éxodo 23:25
“Empero sin fe es imposible agradar á Dios; porque es menester que el que á Dios se allega, crea que le hay, que es galardonador de los que le buscan”
— Hebreos 11:6
“Jesucristo es el mismo ayer, hoy, por los siglos”
— Hebreos 13:8
“El corazón alegre produce buena disposición: Mas el espíritu triste seca los huesos”
— Proverbios 17:22
“Cualquiera que hace pecado, traspasa también la ley; pues el pecado es transgresión de la ley”
— 1 Juan 3:4
“Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, sufrió nuestros dolores; nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios abatido”
— Isaías 53:4
“Mas á vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, en sus alas traerá salud: saldréis, saltaréis como becerros de la manada”
— Malaquías 4:2
“Él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva: ve en paz, queda sana de tu azote”
— Marcos 5:34
“Quitarán serpientes, si bebieren cosa mortífera, no les dañará; sobre los enfermos pondrán sus manos, sanarán”
— Marcos 16:18
“Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque yo estoy debilitado: Sáname, oh Jehová, porque mis huesos están conmovidos”
— Salmos 6:2
“En la fe de su nombre, á éste que vosotros veis conocéis, ha confirmado su nombre: la fe que por él es, ha dado á este esta completa sanidad en presencia de todos vosotros”
— Hechos 3:16
“Sanad los enfermos que en ella hubiere, decidles: Se ha llegado á vosotros el reino de Dios”
— Lucas 10:9
“Luego la fe es por el oir; el oir por la palabra de Dios”
— Romanos 10:17
“Rodeaba Jesús por todas las ciudades aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, predicando el evangelio del reino, sanando toda enfermedad todo achaque en el pueblo”
— Mateo 9:35
“Aconteció un día, que él estaba enseñando, los Fariseos doctores de la ley estaban sentados, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, de Judea Jerusalem: la virtud del Señor estaba allí para sanarlos”
— Lucas 5:17
“El Espíritu del Señor es sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas á los pobres: Me ha enviado para sanar á los quebrantados de corazón; Para pregonar á los cautivos libertad, á los ciegos vista; Para poner en libertad á los quebrantados”
— Lucas 4:18
“Después le halló Jesús en el templo, díjole: He aquí, has sido sanado; no peques más, porque no te venga alguna cosa peor”
— Juan 5:14
“Hermanos, no os quejéis unos contra otros, porque no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta”
— Santiago 5:9
“Otra vez oró, el cielo dió lluvia, la tierra produjo su fruto”
— Santiago 5:18
“Jehová lo sustentará sobre el lecho del dolor: Mullirás toda su cama en su enfermedad”
— Salmos 41:3
“Mas vosotros tenéis la unción del Santo, conocéis todas las cosas”
— 1 Juan 2:20
“Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables homicidas, á los fornicarios hechiceros, á los idólatras, á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego azufre, que es la muerte segunda”
— Apocalipsis 21:8
“Vuestro oro plata están corrompidos de orín; su orín os será testimonio, comerá del todo vuestras carnes como fuego. Os habéis allegado tesoro para en los postreros días”
— Santiago 5:3
“Les dijo: Id por todo el mundo; predicad el evangelio á toda criatura”
— Marcos 16:15
“El que hace pecado, es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”
— 1 Juan 3:8
“No os ha tomado tentación, sino humana: mas fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podeís llevar; antes dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis aguantar”
— 1 Corintios 10:13
“Toda la gente procuraba tocarle; porque salía de él virtud, sanaba á todos”
— Lucas 6:19
“No bebas de aquí adelante agua, sino usa de un poco de vino por causa del estómago, de tus continuas enfermedades”
— 1 Timoteo 5:23
“Ellas se fueron huyendo del sepulcro; porque las había tomado temblor espanto; ni decían nada á nadie, porque tenían miedo”
— Marcos 16:8
“Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme á sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:19
“Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado: he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”
— Mateo 28:20
“Oyéndolo Jesús, les dice: Los sanos no tienen necesidad de médico, mas los que tienen mal. No he venido á llamar á los justos, sino á los pecadores”
— Marcos 2:17
“Oh Jehová, ten misericordia de nosotros, á ti hemos esperado: tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salud en tiempo de la tribulación”
— Isaías 33:2
“Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, como creiste te sea hecho. su mozo fué sano en el mismo momento”
— Mateo 8:13
“Sáname, oh Jehová, seré sano; sálvame, seré salvo: porque tú eres mi alabanza”
— Jeremías 17:14
“Jehová Dios mío, A ti clamé, me sanaste”
— Salmos 30:2
“El ladrón no viene sino para hurtar, matar, destruir: yo he venido para que tengan vida, para que la tengan en abundancia”
— Juan 10:10
“Echaban fuera muchos demonios, ungían con aceite á muchos enfermos, sanaban”
— Marcos 6:13
“Jehová abre los ojos á los ciegos; Jehová levanta á los caídos; Jehová ama á los justos”
— Salmos 146:8
“Quitará Jehová de ti toda enfermedad; todas las malas plagas de Egipto, que tú sabes, no las pondrá sobre ti, antes las pondrá sobre todos los que te aborrecieren”
— Deuteronomio 7:15
“He aquí que yo le hago subir sanidad medicina; los curaré, les revelaré abundancia de paz de verdad”
— Jeremías 33:6
“ENTONCES llamando á sus doce discípulos, les dió potestad contra los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, sanasen toda enfermedad toda dolencia”
— Mateo 10:1
“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual, sin engaño, para que por ella crezcáis en salud”
— 1 Pedro 2:2
“Conviéneme obrar las obrar del que me envió, entre tanto que el día dura: la noche viene, cuando nadie puede obrar”
— Juan 9:4
“Mas sabiendo lo Jesús, se apartó de allí: le siguieron muchas gentes, sanaba á todos”
— Mateo 12:15
“Estas señales seguirán á los que creyeren: En mi nombre echarán fuera demonios; hablaran nuevas lenguas”
— Marcos 16:17
“Ved ahora que yo, yo soy, no hay dioses conmigo: Yo hago morir, yo hago vivir: Yo hiero, yo curo: no hay quien pueda librar de mi mano”
— Deuteronomio 32:39
“Cualquier cosa que pidiéremos, la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, hacemos las cosas que son agradables delante de él”
— 1 Juan 3:22
“Las gentes, viéndolo, se maravillaron, glorificaron á Dios, que había dado tal potestad á los hombres”
— Mateo 9:8
“El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”
— 2 Pedro 3:9
“Oyéndolo Jesús, le respondió: No temas: cree solamente, será salva”
— Lucas 8:50
“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición; (porque está escrito: Maldito cualquiera que es colgado en madero:)”
— Gálatas 3:13
“Empero hay repartimiento de dones; mas el mismo Espíritu es”
— 1 Corintios 12:4
“Respondió Jesús: Ni éste pecó, ni sus padres: mas para que las obras de Dios se manifiesten en él”
— Juan 9:3
“Limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; la muerte no será más; no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor: porque las primeras cosas son pasadas”
— Apocalipsis 21:4
“A otro, fe por el mismo Espíritu, á otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu”
— 1 Corintios 12:9
“Si se humillare mi pueblo, sobre los cuales ni nombre es invocado, oraren, buscaren mi rostro, se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré sus pecados, sanaré su tierra”
— 2 Crónicas 7:14
“La paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo la da, yo os la doy. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”
— Juan 14:27
“Envió su palabra, curólos, librólos de su ruina”
— Salmos 107:20
“Por tanto, os digo que todo lo que orando pidiereis, creed que lo recibiréis, os vendrá”
— Marcos 11:24
“Panal de miel son los dichos suaves. Suavidad al alma medicina á los huesos”
— Proverbios 16:24
“Hacía Dios singulares maravillas por manos de Pablo”
— Hechos 19:11
“Mi carne mi corazón desfallecen: Mas la roca de mi corazón mi porción es Dios para siempre”
— Salmos 73:26
“Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo es posible”
— Marcos 9:23
“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”
— Apocalipsis 1:1
“Como fué ya tarde, trajeron á él muchos endemoniados: echó los demonios con la palabra, sanó á todos los enfermos”
— Mateo 8:16
“Aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebres de disentería: al cual Pablo entró, después de haber orado, le puso las manos encima, le sanó”
— Hechos 28:8
“Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios: de gracia recibisteis, dad de gracia”
— Mateo 10:8
“Habéis vivido en deleites sobre la tierra, sido disolutos; habéis cebado vuestros corazones como en el día de sacrificios”
— Santiago 5:5
“Dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, é hicieres lo recto delante de sus ojos, dieres oído á sus mandamientos, guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié á los Egipcios te enviaré á ti; porque yo soy Jehová tu Sanador”
— Éxodo 15:26
“Mas yo haré venir sanidad para ti, te sanaré de tus heridas, dice Jehová; porque Arrojada te llamaron, diciendo: Esta es Sión, á la que nadie busca”
— Jeremías 30:17
“Habéis condenado muerto al justo; él no os resiste”
— Santiago 5:6
“Jesús le dijo: Ve, tu fe te ha salvado. luego cobró la vista, seguía á Jesús en el camino”
— Marcos 10:52
“Porque todo aquello que es nacido de Dios vence al mundo: esta es la victoria que vence al mundo, nuestra fe”
— 1 Juan 5:4
“Rodeó Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, predicando el evangelio del reino, sanando toda enfermedad toda dolencia en el pueblo”
— Mateo 4:23
“El sana á los quebrantados de corazón, liga sus heridas”
— Salmos 147:3
“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Codiciáis, no tenéis; matáis ardéis de envidia, no podéis alcanzar; combatís gerreáis, no tenéis lo que deseáis, porque no pedís”
— Santiago 4:2