84+ Versículos De La Biblia Sobre Compromiso Con Algo

“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe”

— 2 Timoteo 4:7

“Encomienda á Jehová tu camino, espera en él; él hará”

— Salmos 37:5

“Amarás á Jehová tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, con todo tu poder”

— Deuteronomio 6:5

“Hablóles Jesús otra vez, diciendo: Yo soy la luz del mundo: el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la lumbre de la vida”

— Juan 8:12

“Encomienda á Jehová tus obras, tus pensamientos serán afirmados”

— Proverbios 16:3

“No nos cansemos, pues, de hacer bien; que á su tiempo segaremos, si no hubiéremos desmayado”

— Gálatas 6:9

“Hermanos, yo mismo no hago cuenta de haber lo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, extendiéndome á lo que está delante”

— Filipenses 3:13

“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”

— Apocalipsis 1:1

“Ninguna palabra torpe salga de vuestra boca, sino la que sea buena para edificación, para que dé gracia á los oyentes”

— Efesios 4:29

“Procura con diligencia presentarte á Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad”

— 2 Timoteo 2:15

“En esto hemos conocido el amor, porque él puso su vida por nosotros: también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos”

— 1 Juan 3:16

“Si alguno dice, Yo amo á Dios, aborrece á su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama á su hermano al cual ha visto, ¿cómo puede amar á Dios á quien no ha visto?”

— 1 Juan 4:20

“De cierto, de cierto te digo, que lo que sabemos hablamos, lo que hemos visto, testificamos; no recibís nuestro testimonio”

— Juan 3:11

“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”

— Isaías 41:10

“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas á su luz admirable”

— 1 Pedro 2:9

“El que no ama, no conoce á Dios; porque Dios es amor”

— 1 Juan 4:8

“Porque tengo por cierto que lo que en este tiempo se padece, no es de comparar con la gloria venidera que en nosotros ha de ser manifestada”

— Romanos 8:18

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”

— Jeremías 29:11

“Empero os denunciamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que anduviere fuera de orden, no conforme á la doctrina que recibieron de nosotros”

— 2 Tesalonicenses 3:6

“Porque vendrá tiempo cuando ni sufrirán la sana doctrina; antes, teniendo comezón de oir, se amotonarán maestros conforme á sus concupiscencias”

— 2 Timoteo 4:3

“El ladrón no viene sino para hurtar, matar, destruir: yo he venido para que tengan vida, para que la tengan en abundancia”

— Juan 10:10

“Sea pues perfecto vuestro corazón para con Jehová nuestro Dios, andando en sus estatutos, guardando sus mandamientos, como el día de hoy”

— 1 Reyes 8:61

“Huye también los deseos juveniles; sigue la justicia, la fe, la caridad, la paz, con los que invocan al Señor de puro corazón”

— 2 Timoteo 2:22

“Por tanto, dejará el hombre á su padre á su madre, allegarse ha á su mujer, serán una sola carne”

— Génesis 2:24

“Mirad que ninguno os engañpor filosofías vanas sustilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme á los elementos del mundo, no según Cristo”

— Colosenses 2:8

“Cualquiera que hace pecado, traspasa también la ley; pues el pecado es transgresión de la ley”

— 1 Juan 3:4

“A él conviene crecer, mas á mí menguar”

— Juan 3:30

“Este es mi mandamiento: Que os améis los unos á los otros, como yo os he amado”

— Juan 15:12

“He aquí, yo estoy á la puerta llamo: si alguno oyere mi voz abriere la puerta, entraré á él, cenaré con él, él conmigo”

— Apocalipsis 3:20

“Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración ruego, con hacimiento de gracias”

— Filipenses 4:6

“Si me amáis, guardad mis mandamientos”

— Juan 14:15

“El segundo es semejante á éste: Amarás á tu prójimo como á ti mismo”

— Mateo 22:39

“El Padre ama al Hijo, todas las cosas dió en su mano”

— Juan 3:35

“¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?”

— 1 Corintios 6:2

“Si confesamos nuestros pecados, él es fiel justo para que nos perdone nuestros pecados, nos limpie de toda maldad”

— 1 Juan 1:9

“Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”

— Romanos 5:8

“Porque no nos ha dado Dios el espíritu de temor, sino el de fortaleza, de amor, de templanza”

— 2 Timoteo 1:7

“Dios no es hombre, para que mienta; Ni hijo de hombre para que se arrepienta: El dijo, ¿no hará?; Habló, ¿no lo ejecutará?”

— Números 23:19

“Porque ninguna cosa es imposible para Dios”

— Lucas 1:37

“Honroso es en todos el matrimonio, el lecho sin mancilla; ùmas á los fornicarios á los adúlteros juzgará Dios”

— Hebreos 13:4

“Vinieron á Juan, dijéronle: Rabbí, el que estaba contigo de la otra parte del Jordán, del cual tú diste testimonio, he aquí bautiza, todos vienen á él”

— Juan 3:26

“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”

— Filipenses 4:13

“Así que, todas las cosas que quisierais que los hombres hiciesen con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esta es la ley los profetas”

— Mateo 7:12

“Por lo cual asimismo padezco esto: mas no me avergüenzo; porque yo sé á quien he creído, estoy cierto que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día”

— 2 Timoteo 1:12

“El viento de donde quiere sopla, oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni á dónde vaya: así es todo aquel que es nacido del Espíritu”

— Juan 3:8

“La paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo la da, yo os la doy. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”

— Juan 14:27

“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, de toda tu mente”

— Mateo 22:37

“Todo lo que hagáis, hacedlo de ánimo, como al Señor, no á los hombres”

— Colosenses 3:23

“Si mal os parece servir á Jehová, escogeos hoy á quién sirváis; si á los dioses á quienes siervieron vuestros padres, cuando estuvieron de esotra parte del río, ó á los dioses de los Amorrheos en cuya tierra habitáis: que yo mi casa serviremos á Jehová”

— Josué 24:15

“No os engañeis: Dios no puede ser burlado: que todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”

— Gálatas 6:7

“Venid á mí todos los que estáis trabajados cargados, que yo os haré descansar”

— Mateo 11:28

“No os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”

— Romanos 12:2

“SEGUN su antojo busca el que se desvía, se entremete en todo negocio”

— Proverbios 18:1

“Huid la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre hiciere, fuera del cuerpo es; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”

— 1 Corintios 6:18

“Mas buscad primeramente el reino de Dios su justicia, todas estas cosas os serán añadidas”

— Mateo 6:33

“No tengas ningún temor de las cosas que has de padecer. He aquí, el diablo ha de enviar algunos de vosotros á la cárcel, para que seáis probados, tendréis tribulación de diez días. Sé fiel hasta la muerte, yo te daré la corona de la vida”

— Apocalipsis 2:10

“Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros”

— 1 Pedro 5:7

“Porque los ojos de Jehová contemplan toda la tierra, para corroborar á los que tienen corazón perfecto para con él. Locamente has hecho en esto; porque de aquí adelante habrá guerra contra ti”

— 2 Crónicas 16:9

“Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras es muerta”

— Santiago 2:26

“Empero gracias á Dios, que aunque fuistes siervos del pecado, habéis obedecido de corazón á aquella forma de doctrina á la cual sois entregados”

— Romanos 6:17

“Á Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos ó entendemos, por la potencia que obra en nosotros”

— Efesios 3:20

“¿Pues qué diremos á esto? Si Dios por nosotros, ¿quién contra nosotros?”

— Romanos 8:31

“Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras obras buenas, glorifiquen á vuestro Padre que está en los cielos”

— Mateo 5:16

“El que tiene la esposa, es el esposo; mas el amigo del esposo, que está en pie le oye, se goza grandemente de la voz del esposo; así pues, este mi gozo es cumplido”

— Juan 3:29

“Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados una casa espitirual, un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales, agradables á Dios por Jesucristo”

— 1 Pedro 2:5

“ASI que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable á Dios, que es vuestro racional culto”

— Romanos 12:1

“El cual siendo el resplandor de su gloria, la misma imagen de su sustancia, sustentando todas las cosas con la palabra de su potencia, habiendo hecho la purgación de nuestros pecados por sí mismo, se sentó á la diestra de la Majestad en las alturas”

— Hebreos 1:3

“Oirás pues la voz de Jehová tu Dios, cumplirás sus mandamientos sus estatutos, que yo te ordeno hoy”

— Deuteronomio 27:10

“Porque ciertamente Dios estaba en Cristo reconciliando el mundo á sí, no imputándole sus pecados, puso en nosotros la palabra de la reconciliación”

— 2 Corintios 5:19

“Pasado esto, vino Jesús con sus discípulos á la tierra de Judea; estaba allí con ellos, bautizaba”

— Juan 3:22

“Estas cosas os he hablado, para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción: mas confiad, yo he vencido al mundo”

— Juan 16:33

“Esta es la condenación: porque la luz vino al mundo, los hombres amaron más las tinieblas que la luz; porque sus obras eran malas”

— Juan 3:19

“Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz no viene á la luz, porque sus obras no sean redargüidas”

— Juan 3:20

“Nadie tiene mayor amor que este, que ponga alguno su vida por sus amigos”

— Juan 15:13

“Mas el fruto del Espíritu es: caridad, gozo, paz, tolerancia, benignidad, bondad, fe”

— Gálatas 5:22

“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensad”

— Filipenses 4:8

“RESTA pues, hermanos, que os roguemos exhortemos en el Señor Jesús, que de la manera que fuisteis enseñados de nosotros de cómo os conviene andar, agradar á Dios, así vayáis creciendo”

— 1 Tesalonicenses 4:1

“ES pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven”

— Hebreos 11:1

“Porque no me avergüenzo del evangelio: porque es potencia de Dios para salud á todo aquel que cree; al Judío primeramente también al Griego”

— Romanos 1:16

“Todo el pueblo respondió á una, dijeron: Todo lo que Jehová ha dicho haremos. Moisés refirió las palabras del pueblo á Jehová”

— Éxodo 19:8

“Perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan, en las oraciones”

— Hechos 2:42

“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”

— Juan 14:6

“No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos; tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”

— Hebreos 10:25

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

— Juan 3:16

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, vivo, no ya yo, mas vive Cristo en mí: lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, se entregó á sí mismo por mí”

— Gálatas 2:20

“Quien cuando le maldecían no retornaba maldición: cuando padecía, no amenazaba, sino remitía la causa al que juzga justamente”

— 1 Pedro 2:23

“El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos á los pecados, vivamos á la justicia: por la herida del cual habéis sido sanados”

— 1 Pedro 2:24