62+ Versículos De La Biblia Sobre Entrando Por Las Puertas Del Cielo

“Limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; la muerte no será más; no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor: porque las primeras cosas son pasadas”

— Apocalipsis 21:4

“Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, que entren por las puertas en la ciudad”

— Apocalipsis 22:14

“En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, á preparar lugar para vosotros”

— Juan 14:2

“Teniendo la claridad de Dios: su luz era semejante á una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, resplandeciente como cristal”

— Apocalipsis 21:11

“Las doce puertas eran doce perlas, en cada una, una; cada puerta era de una perla. la plaza de la ciudad era de oro puro como vidrio trasparente”

— Apocalipsis 21:21

“Procura con diligencia presentarte á Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad”

— 2 Timoteo 2:15

“Bien que esperamos cielos nuevos tierra nueva, según sus promesas, en los cuales mora la justicia”

— 2 Pedro 3:13

“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”

— Apocalipsis 1:1

“Allí no habrá más noche; no tienen necesidad de lumbre de antorcha, ni de lumbre de sol: porque el Señor Dios los alumbrará: reinarán para siempre jamás”

— Apocalipsis 22:5

“Empero deseaban la mejor, es á saber, la celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos: porque les había aparejado ciudad”

— Hebreos 11:16

“He aquí, yo vengo presto, mi galardón conmigo, para recompensar á cada uno según fuere su obra”

— Apocalipsis 22:12

“Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra”

— Mateo 6:10

“Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo, que hoy estarás conmigo en el paraíso”

— Lucas 23:43

“Viendo al hombre que había sido sanado, que estaba con ellos, no podían decir nada en contra”

— Hechos 4:14

“No habrá más maldición; sino que el trono de Dios del Cordero estará en ella, sus siervos le servirán”

— Apocalipsis 22:3

“Entrad por la puerta estrecha: porque ancha es la puerta, espacioso el camino que lleva á perdición, muchos son los que entran por ella”

— Mateo 7:13

“Dijo: De cierto os digo, que si no os volviereis, fuereis como niños, no entraréis en el reino de los cielos”

— Mateo 18:3

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

— Juan 3:16

“Entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Por qué pensáis dentro de vosotros, hombres de poca fe, que no tomasteis pan?”

— Mateo 16:8

“Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios”

— Juan 3:5

“Entonces Pilato, oyendo de Galilea, preguntó si el hombre era Galileo”

— Lucas 23:6

“No entrará en ella ninguna cosa sucia, ó que hace abominación mentira; sino solamente los que están escritos en el libro de la vida del Cordero”

— Apocalipsis 21:27

“Todo árbol que no lleva buen fruto, córtase échase en el fuego”

— Mateo 7:19

“Este Ephrón hallábase entre los hijos de Heth: respondió Ephrón Hetheo á Abraham, en oídos de los hijos de Heth, de todos los que entraban por la puerta de su ciudad, diciendo”

— Génesis 23:10

“Este vino á Jesús de noche, díjole: Rabbí, sabemos que has venido de Dios por maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no fuere Dios con él”

— Juan 3:2

“El séptimo ángel tocó la trompeta, fueron hechas grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido á ser los reinos de nuestro Señor, de su Cristo: reinará para siempre jamás”

— Apocalipsis 11:15

“El Señor, después que les habló, fué recibido arriba en el cielo, sentóse á la diestra de Dios”

— Marcos 16:19

“Mas nuestra vivienda es en los cielos; de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”

— Filipenses 3:20

“No que ya haya alcanzado, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si alcanzo aquello para lo cual fuí también alcanzado de Cristo Jesús”

— Filipenses 3:12

“Vosotros pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre”

— Mateo 6:9

“No vi en ella templo; porque el Señor Dios Todopoderoso es el templo de ella, el Cordero”

— Apocalipsis 21:22

“Mas yo también te digo, que tú eres Pedro, sobre esta piedra edificaré mi iglesia; las puertas del infierno no prevalecerán contra ella”

— Mateo 16:18

“Yo Juan vi la santa ciudad, Jerusalem nueva, que descendía del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido”

— Apocalipsis 21:2

“Respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío. iban juntos”

— Génesis 22:8

“El que creyere fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado”

— Marcos 16:16

“Llevóme en Espíritu á un grande alto monte, me mostró la grande ciudad santa de Jerusalem, que descendía del cielo de Dios”

— Apocalipsis 21:10

“Entonces el ángel de Jehová le dió voces del cielo, dijo: Abraham, Abraham. él respondió: Heme aquí”

— Génesis 22:11

“El que recibe su testimonio, éste signó que Dios es verdadero”

— Juan 3:33

“El que cree en el Hijo, tiene vida eterna; mas el que es incrédulo al Hijo, no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él”

— Juan 3:36

“Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, alzaos vosotras, puertas eternas, entrará el Rey de gloria”

— Salmos 24:9

“Bendiciendo te bendeciré, multiplicando multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo, como la arena que está á la orilla del mar; tu simiente poseerá las puertas de sus enemigos”

— Génesis 22:17

“Desde entonces comenzó Jesús á predicar, á decir: Arrepentíos, que el reino de los cielos se ha acercado”

— Mateo 4:17

“Á ti daré las llaves del reino de los cielos; todo lo que ligares en la tierra será ligado en los cielos; todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos”

— Mateo 16:19

“Esta empero es la vida eterna: que te conozcan el solo Dios verdadero, á Jesucristo, al cual has enviado”

— Juan 17:3

“En ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado á los hombres, en que podamos ser salvos”

— Hechos 4:12

“Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables homicidas, á los fornicarios hechiceros, á los idólatras, á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego azufre, que es la muerte segunda”

— Apocalipsis 21:8

“Ahora vemos por espejo, en obscuridad; mas entonces veremos cara á cara: ahora conozco en parte; mas entonces conoceré como soy conocido”

— 1 Corintios 13:12

“Traed todos los diezmos al alfolí, haya alimento en mi casa; probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde”

— Malaquías 3:10

“Midió su muro, ciento cuarenta cuatro codos, de medida de hombre, la cual es del ángel”

— Apocalipsis 21:17

“Lo que es nacido de la carne, carne es; lo que es nacido del Espíritu, espíritu es”

— Juan 3:6

“Porque la paga del pecado es muerte: mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”

— Romanos 6:23

“Ellas se fueron huyendo del sepulcro; porque las había tomado temblor espanto; ni decían nada á nadie, porque tenían miedo”

— Marcos 16:8

“La ciudad no tenía necesidad de sol, ni de luna, para que resplandezcan en ella: porque la claridad de Dios la iluminó, el Cordero era su lumbrera”

— Apocalipsis 21:23

“Porque no tenemos lucha contra sangre carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires”

— Efesios 6:12

“El pabellón de la puerta del atrio fue de obra de recamado, de jacinto, púrpura, carmesí, lino torcido: la longitud de veinte codos, la altura en el ancho de cinco codos, conforme á las cortinas del atrio”

— Éxodo 38:18

“Antes, como está escrito: Cosas que ojo no vió, ni oreja oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que ha Dios preparado para aquellos que le aman”

— 1 Corintios 2:9

“Tuvo miedo, dijo: ­Cuán terrible es este lugar! No es otra cosa que casa de Dios, puerta del cielo”

— Génesis 28:17

“Tenía un muro grande alto con doce puertas; en las puertas, doce ángeles, nombres escritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel”

— Apocalipsis 21:12

“Jesús dijo: Dejad á los niños, no les impidáis de venir á mí; porque de los tales es el reino de los cielos”

— Mateo 19:14

“El que no me ama, no guarda mis palabras: la palabra que habéis oído, no es mía, sino del Padre que me envió”

— Juan 14:24

“Sus puertas nunca serán cerradas de día, porque allí no habrá noche”

— Apocalipsis 21:25

“Nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre, que está en el cielo”

— Juan 3:13

“Porque de esta manera os será abundantemente administrada la entrada en el reino eterno de nuestro Señor Salvador Jesucristo”

— 2 Pedro 1:11

“Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, mis pensamientos más que vuestros pensamientos”

— Isaías 55:9

“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”

— Juan 14:6